1 de dic de 2023

Doblamos la apuesta por el clima y nos proponemos reducir las emisiones de CO2 por vehículo en un 75 % de aquí a 2030.

Se acerca la cumbre del clima COP28 en Dubai. Y como las empresas tienen que hacer más para luchar contra el cambio climático, estamos afinando aún más nuestro objetivo de reducción de emisiones de CO2, así como elaborando planes para utilizar acero y aluminio con emisiones próximas a cero.

Vista panorámica de un vehículo Volvo renderizado

Ahora estamos redoblando nuestro plan de acción por el clima, que ya es uno de los más ambiciosos de la industria automovilística.

Mientras los líderes mundiales se preparan para la cumbre climática COP28 de Dubai, creemos que es una oportunidad para ir más lejos que nunca en términos de acción climática. En lugar de dormirnos en los laureles, el mundo debe mostrar avances en los compromisos existentes y subir las expectativas para hacer más.


Por eso estamos redoblando nuestro plan de acción por el clima, que ya es uno de los más ambiciosos de la industria automovilística. Como parte de nuestra ambición de llegar a ser neutros para el clima en 2040, hoy anunciamos nuestro objetivo de reducir las emisiones de CO2 por vehículo en un 75 % para 2030, en comparación con la referencia de 2018.


Esto complementa nuestro objetivo previamente anunciado de reducir las emisiones de CO2 por vehículo en un 40 % entre 2018 y 2025. Durante los nueve primeros meses de este año, las emisiones globales de CO2 por vehículo fueron un 19 % inferiores en comparación con nuestro valor de referencia de 2018.

"La COP28 es un momento histórico de rendición de cuentas para la acción por el clima", afirma Javier Varela, director de operaciones y consejero delegado adjunto de Volvo Cars. "El mundo necesita unirse y actuar urgentemente para evitar los peores efectos del cambio climático. Nos comprometemos a hacer nuestra parte y pedimos a los líderes empresariales y políticos de todo el mundo que también hagan la suya".

Alcanzar un objetivo tan ambicioso de reducción del 75 % para 2030 exige que continuemos trabajando en nuestra ambición actual de vender únicamente vehículos totalmente eléctricos para 2030, eliminando así las emisiones del tubo de escape de nuestra gama de modelos.


A principios de este año, desvelamos el pequeño SUV EX30 totalmente eléctrico, diseñado para tener la huella de carbono más baja de todos los vehículos Volvo hasta la fecha. El EX30 es uno de los varios modelos nuevos de Volvo totalmente eléctricos que hemos lanzado y lanzaremos en los próximos años, en nuestro camino para convertirnos en un fabricante de vehículos totalmente eléctricos en 2030. Y estamos avanzando a buen ritmo: durante los nueve primeros meses de 2023, los vehículos totalmente eléctricos representaron el 16 % de nuestras ventas totales.


También hemos anunciado que produciremos nuestro último vehículo diésel a principios de 2024 y hemos detenido las inversiones en I+D de nuevos motores de combustión interna. En lugar de centrarnos en las tecnologías del pasado, tenemos la mirada puesta en el futuro.


Al mismo tiempo, tenemos que hacer frente a las emisiones en toda nuestra cadena de suministro y nuestras propias operaciones (incluida la logística), con el objetivo de reducirlas en un 30 % cada una de ellas para 2030, en comparación con la base de referencia de 2018.


Aquí ya estamos haciendo muchas cosas. En 2022, hasta el 69 % de nuestras operaciones funcionarán con energía neutra para el clima. Y desde entonces, hemos conseguido un 100% de electricidad neutra para el clima en todas las plantas del mundo, lo que contribuirá a reducir nuestras emisiones operativas.

Este verano, nos convertimos en el primer fabricante mundial de vehículos en anunciar el cambio del combustible fósil al biocombustible para el 86 % de nuestro transporte marítimo intercontinental. Esto reduce nuestras emisiones de CO2 en el transporte marítimo en un 84 % y respalda nuestra ambición de reducir las emisiones operativas en un 30 % para 2030.


Un largo camino por recorrer

La COP28 se celebra con el telón de fondo del Informe de las Naciones Unidas sobre el inventario mundial del clima, publicado en septiembre. El informe indica hasta qué punto el mundo está en vías de mantener el calentamiento global limitado a 1.5 grados con respecto a los niveles preindustriales, el límite acordado en el Acuerdo de París de 2015.


La desalentadora conclusión del informe es que el mundo va por mal camino. Por ejemplo, cada año se siguen gastando 450 000 millones de dólares en subvenciones a los combustibles fósiles en lugar de a las energías renovables. También se espera que el mundo siga emitiendo 22 000 millones de toneladas de CO2 más que el nivel previsto para 2030 para mantener el objetivo del Pri. En otras palabras, el informe destaca la urgente necesidad de una mayor acción por el clima.


Al mismo tiempo, el Informe de Evaluación también afirma que, para la industria automovilística, "la eliminación progresiva de los motores de combustión interna y el uso de vehículos eléctricos ofrecen el mayor potencial de mitigación en el sector". Esto subraya que la electrificación es vital para garantizar que la industria del transporte en general contribuya a lograr una transición hacia un futuro más sostenible en la Tierra. Esa conclusión concuerda en gran medida con nuestra propia hoja de ruta de electrificación.


"La COP28 es un momento histórico de rendición de cuentas para la acción por el clima", afirma Javier Varela, director de operaciones y consejero delegado adjunto de Volvo Cars. "El mundo necesita unirse y actuar urgentemente para evitar los peores efectos del cambio climático. Nos comprometemos a hacer nuestra parte y pedimos a los líderes empresariales y políticos de todo el mundo que también hagan la suya".


La colaboración es clave

Por supuesto, nadie puede luchar solo contra el cambio climático. Reconocemos que debemos colaborar con otros en la adopción de medidas para garantizar que vamos más allá de la electrificación para reducir las emisiones en todas nuestras operaciones y cadena de suministro. Debemos colaborar con socios afines para reducir las emisiones de las industrias que siguen dependiendo de procesos intensivos en carbono, en los llamados sectores "difíciles de eliminar".


Nos complace anunciar que Volvo Cars es ahora miembro de la First Movers Coalition (FMC) del Foro Económico Mundial. Al unirnos a esta coalición de algunas de las mayores empresas del mundo, estamos poniendo nuestro poder adquisitivo al servicio de las tecnologías limpias emergentes en el sector del aluminio, señalando claramente nuestra demanda de aluminio con emisiones próximas a cero". Con ello, esperamos desempeñar un papel en la reducción de las emisiones directas de la producción de aluminio primario para conseguir un sector del aluminio neto cero en 2050.


También estamos actuando en la industria siderúrgica, a través de nuestra colaboración con el productor de acero sueco SSAB. Fuimos el primer fabricante de vehículos que se asoció con SSAB para explorar un acero de alta calidad y emisiones próximas a cero para la industria automovilística. Ahora, hemos conseguido acceso a láminas de acero primario y reciclado de emisiones casi nulas de SSAB, que tenemos previsto utilizar en un programa de vehículos de aquí a 2026.


"Ya hemos utilizado las cumbres de la COP para impulsar la acción climática colectiva y la COP28 no será diferente", afirma Jonas Otterheim, responsable de acción climática de Volvo Cars. "Lo que nosotros y otras empresas afines intentamos hacer es desarrollar y ampliar tecnologías transformadoras para descarbonizar procesos industriales a veces ancestrales. Al unirnos al FMC y mostrar avances tangibles en nuestra asociación con SSAB, esperamos demostrar que este cambio vital no solo es posible, sino que ya está en marcha".


Letra pequeña

Compartir