El control de velocidad constante adaptativo utiliza aproximadamente un 40 % de la capacidad del freno de servicio. Si es necesario frenar el automóvil con mayor fuerza de la que es capaz de hacerlo el Control de velocidad constante adaptativo y el conductor no frena, se activará una luz de advertencia y una señal acústica para avisar al conductor de que debe actuar inmediatamente.
Nota
Las señales de advertencia visuales en el parabrisas pueden resultar difíciles de detectar bajo una luz intensa del sol, con reflejos, contrastes luminosos extremos, durante el uso de gafas de sol o si el conductor no dirige la mirada recta hacia adelante.
Advertencia
El control de velocidad constante adaptativo solo avisa de vehículos que detecta su radar. Por eso, una advertencia puede no activarse o producirse con cierto retraso.
- Nunca espere ninguna advertencia para frenar cuando sea necesario.