Nuestro nuevo Volvo EX30 tiene la menor huella de carbono de todos los vehículos eléctricos puros de Volvo hasta la fecha¹. Según el informe de análisis de ciclo de vida del EX30 que acabamos de publicar.
El Volvo EX30 en azul cloud
Nuestras renovadas ambiciones de sostenibilidad son tan claras como el cielo de un día de verano: queremos alcanzar las cero emisiones netas de gases de efecto invernadero y convertirnos en una empresa circular para 2040.
Un componente clave para lograrlo es transformar nuestra selección de vehículos en una cartera de modelos eléctricos puros. Y mientras lo hacemos, nos comprometemos a ser transparentes sobre el impacto que tienen nuestros vehículos en el medio ambiente.
Por eso hemos realizado unos exhaustivos informes de análisis del ciclo de vida (LCA) de la huella de carbono de nuestros tres vehículos eléctricos puros: el Volvo EX40, el EC40 y, ahora, el EX30. Al poner estos informes a disposición del público, esperamos ayudar a los clientes a tomar decisiones fundamentadas a la hora de escoger su siguiente vehículo eléctrico.
«La transición a los vehículos eléctricos es fundamental para limitar el cambio climático, pero es necesaria una mayor transparencia sobre sus desafíos para reducir aún más las emisiones», declara Jonas Otterheim, director de acción climática en Volvo Cars. «Mediante el estudio de la huella de carbono del EX30 y la identificación de sus procesos y materias principales, pretendemos proporcionar información valiosa que permita orientar las decisiones hacia una mayor sostenibilidad, tanto en nuestra empresa como en el sector en su conjunto».
El informe de LCA del EX30, disponible aquí, destaca los principales materiales y procesos que contribuyen a las emisiones de gases de efecto invernadero de nuestro SUV eléctrico más compacto. Abarca todo el ciclo de vida del vehículo, desde la extracción y refinado de las materias primas hasta el final de la vida útil del vehículo.
El informe muestra que el Volvo EX30 tiene la menor huella de carbono de todos los vehículos Volvo eléctricos puros hasta la fecha². La huella de carbono total es de 23 toneladas, lo cual representa aproximadamente un 60 por ciento menos que la del XC40 con motor de combustión interna de gasolina. Esta cifra se basa en 200.000 kilómetros de conducción con consumo de electricidad de carga procedente del mix energético europeo.
La letra pequeña es lo que cuenta, así que vamos a profundizar más en los detalles del informe.
El tipo de batería y el mix eléctrico tienen un gran impacto
La elección del tipo de batería y las fuentes de electricidad influyen de forma importante en la huella de carbono del vehículo. Para dar a nuestros clientes más libertad a la hora de elegir la tecnología de batería que mejor se adapte a sus necesidades, el EX30 dispone de dos opciones de batería.
La primera opción, que se utiliza en la versión de motor sencillo, es una batería de litio-ferrofosfato (LFP) con una capacidad de 51 kWh. La segunda opción, que se utiliza en la de versión motor sencillo con autonomía ampliada, es una variante de níquel, cobalto y manganeso (NMC) con una capacidad de 69 kWh.
La batería NMC ofrece mayor autonomía y tiempos de carga más rápidos, pero también presenta un mayor impacto medioambiental a lo largo del ciclo de vida que la batería LFP. De media, la batería LFP tiene una huella de carbono de ciclo de vida un 16 por ciento menor que la batería NMC.
El uso de electricidad de origen eólico para cargar el EX30 también reduce significativamente la huella de carbono en comparación con los mixes de electricidad global o europeo, en aproximadamente un 42 % y un 22 % respectivamente³. Esto subraya la necesidad de acelerar las inversiones en infraestructura de energía renovable a nivel mundial para que los automóviles eléctricos alcancen su máximo potencial climático.
Un paso importante hacia nuestras ambiciones
Un vehículo no solo se conduce. También se diseña, desarrolla, construye y transporta, lo cual nos brinda múltiples oportunidades de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y acercarnos más a la consecución de nuestras ambiciones de sostenibilidad.
El EX30 ya cuenta con la mayor proporción de materiales reciclados de todos los vehículos Volvo hasta la fecha. Aproximadamente el 25 por ciento del aluminio, casi el 20 por ciento del acero y en torno al 17 por ciento de todos los plásticos que se utilizan en el vehículo son reciclados.
Además, en toda nuestra cadena de suministro y fabricación hay en marcha iniciativas interesantes destinadas a reducir aún más las emisiones. Por ejemplo, para 2025, nuestros proveedores de baterías tienen como objetivo reducir las emisiones de la fabricación de baterías LFP en un 20 por ciento y las baterías NMC en un 46 por ciento. Pretenden conseguirlo haciendo un cambio a fuentes de energía renovables, aumentando el uso de materiales reciclados y reduciendo emisiones en sus cadenas de suministro.
Puedes consultar el informe LCA aquí.
¹ La declaración de la huella de carbono más baja de cualquier vehículo Volvo eléctrico puro hasta la fecha tiene relación con productos disponibles en todo el mundo durante más de 200.000 kilómetros de conducción usando el mismo mix energético.
² La declaración de la menor huella de carbono de cualquier vehículo Volvo eléctrico puro hasta la fecha tiene relación con productos disponibles en todo el mundo con más de 200.000 kilómetros de conducción usando el mismo mix energético.
³ Basado en un motor sencillo equipado con una batería LFP (51 kWh) con 15 años y 200.000 kilómetros de conducción, empleando un mix energético medio de la UE28.