Los asientos delanteros accionados eléctricamente disponen de una protección de sobrecarga que se activa si algún objeto obstruye el asiento. En ese caso, retire el objeto y vuelva a mover el asiento.
El asiento puede ajustarse ligeramente después de haber abierto la puerta y sin haber arrancado el motor. El ajuste del asiento puede hacerse siempre cuando el motor está en marcha. El ajuste también puede efectuarse durante algún tiempo después de apagar el motor.