Los distintos modos de conducción disponibles en su automóvil se adaptan a diferentes situaciones y tipos de conducción. Dependiendo del modo de conducción que seleccione, pueden verse afectadas determinadas dinámicas de conducción, como la dirección, la suspensión, el frenado y la aceleración. Los distintos modos de conducción también permiten diferentes ajustes, tanto relacionados con la conducción como con el clima.

El automóvil tiene dos modos de conducción:
Estándar | Este es el modo predeterminado y se recomienda para el uso diario. También se selecciona automáticamente cada vez que arranca el automóvil. |
Modo Off road | El modo Off-road o todoterreno es adecuado para circular por terrenos accidentados o por carreteras de accesibilidad limitada. La suspensión del automóvil se eleva, lo que aumenta la distancia al suelo. El modo Off-road también activa el control de descensos, que permite al automóvil frenar de una forma más controlada y activa en una bajada. |
Nota
Modo Off road
El modo Off-road tiene sus limitaciones y solo está disponible por debajo de determinadas velocidades. La conducción con la suspensión elevada solo está disponible a velocidades inferiores a 25 km/h (15 mph). De forma predeterminada, la suspensión de su automóvil recupera automáticamente su altura anterior cuando se supera este límite de velocidad. Sin embargo, el control de descensos está disponible hasta que llega a 40 km/h (25 mph). Al circular a velocidades superiores el modo Off-road se desactiva por completo. Si esto ocurre durante la conducción por una cuesta abajo pronunciada, el efecto del frenado automático del control de descensos se reducirá de forma gradual.
El consumo de combustible puede aumentar al conducir con el modo Off-road seleccionado.
La selección del modo Off-road desactiva la función de arranque y parada.
El modo Off-road no está diseñado para utilizarse en la vía pública.